Niño minero de Potosí
NIÑO MINERO DE POTOSÍ
No es tu calle la esperanza.
En tu calle nunca crecen
los tomillos ni las dalias.
Tu calle mira al abismo
donde el azar más se ensaña.
Tu calle en la bocamina
como puerta de la casa.
Llevas noche hasta en las uñas,
el cansancio en las pestañas
y en el túnel de tus días
no se avista la mañana.
Un rayo de sol… un sueño,
un soplo de viento… alas.
¿Quién te gana las derrotas?
¿Quién tira lo que tú lastras?
Tus manos piden pupitre
y sólo recibes lajas.
Y el cielo –dicen- tan cerca
sólo cóndores abraza.
Y qué vacíos tus ojos.
Qué abiertos
qué solos
qué amargos
qué pronto
tu calle no es la esperanza.
Asun Monsalve
Febrero de 2008
posted by ágatas, cueros y cristales at 12:05 a. m.
9 Comments:
La foto habla por si misma "Llevas sueño hasta en las uñas,
el cansancio en las pestañas
y en el túnel de tus días"
La esperanza no existe en muchos rincones,y los lujos como el aire en la cara,el sol,la lluvia cuando es bienvenida...que poco reparamos en los lujos tan habituales que nos rodean,por eso,por ser habituales.
Recordemos siempre que aunque habituales,son privilegios,que en muchos rincones no se pueden ni soñar.
Qué extremecedor, qué fantástico poema,qué lejos de vivir como un niño. ¿Qué hacen los paises que lo visitan, lo ven, lo viven? Se supone que pretenden hacer algo por ellos¿no?
Desde luego, el documental de estos niños es extremecedor. Y sólo es realidad. Merece la pena verlo, desde luego.
Gracias, Víctor y Loli por vuestras palabras. Es de los pocos poemas que he escrito casi de una "atacada". También para Jota que -como no puede entrar en el blog- envía sus comentarios por correo. Lo dicho Jota, cuando quieras el DVD te lo paso.
PRECIOSOS VERSOS SI NO FUERAN TAN REALES, CREO QUE LO ESCRIBISTE TAN PRONTO PORQUE TE SALIO DEL ALMA EL POEMA, COMO DICE VICTOR QUE POCO VALORAMOS EL VIVIR "A ESTE LADO DE LA POBREZA"
OJALÁ UN DÍA ESE TUNEL LES LLEVE A VER LA ESPERANZA.
Ya estás por aquí JOTA. ¡¡Al fin!!!
Guarda esa palabra-clave en un cofre bajo 4 llaves. Ahora mismo paso por tu espacio...
Un gusto
desde el mundo de gaia he llegado a tu blog y me he quedado un rato, que diferencia ser niño en un lugar u otro del mundo.
un saludo desde cantabria
Bienvenido por mis tierras, Santiago. Encontraré algún momento de calma para dejarme pasar por las tuyas (en un vistazo rápido me ha parecido un blog muy variado. Con poesía). Un saludo
Un poema bellísimo.
Felicitaciones.
Creo que sos asturiana, verdad? Entonces, el dolor de los mineros, no será para vos algo desconocido. Las terribles historias del subsuelo, no se borran, no se evapora la energía con el movimiento frívolo de un abanico.
La queja, que es la misma, en todas las latitudes, aunque se espacien en el tiempo, se sostendrá en los flecos de las historias de abuelos, en las leyendas que nos sobrevivirán y a nuestros hijos.
Eso si, en medio de la crueldad del destino, de la injusticia, de la explotación, hay esperanza en los ojos de los niños: de los mineros, de los campesinos, de los que lustran botas. Debe haberlo, de lo contrario América, ya no tendría razónes para vivir.
Un fuerte abrazo
Llegué hasta aquí volando como el alcaudon, para llevarme la alegría de tus versos.
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